lunes, 17 de septiembre de 2012

Embriología, Anatomía y Fisiología del Oído


Embriología  del Oído Externo
El oído externo se deriva del primer surco faríngeo.  Se forma a partir del ectodermo. Es el único residuo de la primera hendidura branquial. El embrión de 5 semanas se caracteriza por la presencia de las 4 hendiduras faríngeas, la parte dorsal de la primera hendidura penetra en el mesénquima inferior y da origen al conducto auditivo externo. El revestimiento epitelial del fondo del conducto participa en la formación del tímpano.
Pabellón auricular
El pabellón auricular se forma a partir de seis proliferaciones mesenquimatosas, también llamadas coliculli, en los extremos dorsales del primer y segundo arco branquial, y rodea la primera hendidura faríngea. Estas prominencias, tres a cada lado se fusionan más tarde y forman el pabellón auricular definitivo. En un principio, los oídos externos se encuentran en la región inferior del cuello, pero con el desarrollo del maxilar inferior, ascienden hasta los lados del la cabeza, a la altura del cuello.
El lóbulo es la última parte en desarrollarse.

Conducto auditivo externo
Está formado por restos de la primera hendidura branquial. Se desarrolla a partir de la porción dorsal de la primera hendidura faríngea.
 A partir del 3º mes las células epiteliales del fondo del conducto proliferan formando una placa epitelial macisa, el  tapón meatal.
 En el 7º mes este tapón se disgrega y el revestimiento epitelial del suelo del conducto participa de la formación definitiva del tímpano.
Membrana timpánica La parte principal del tímpano está unida firmemente al mango del martillo, en tanto que el resto forma la separación entre el CAE y la cavidad timpánica. La pars tensa, se deriva de una capa de mesénquima que se interpone entre el endo y el ectoblasto. La parte más externa de la membrana timpánica se forma por una profundización de ectodermo.
 Tiene 3 orígenes:
Endodermo
Mesodérmico
Ectodermo
Oído Externo
Aparato de transmisión que recoge las ondas sonoras del ambiente y las conduce al oído interno.
El oído externo está formado por:
El pabellón auricular: ubicado en ambos lados de la cabeza, delante del mastoideo y detrás de la articulación temporomandibular, está compuesto por un cartílago elástico y está cubierta por piel.
Conducto auditivo externo: tiene una forma de una S, se extiende desde el pabellón auricular hasta el tímpano. Su pared está conformada por una porción cartilaginosa (móvil) que es la mitad externa. La primera es continuación de la estructura cartilaginosa del pabellón auricular, la zona ósea, que es la mitad interna está constituida por el hueso del tímpano y la región escamosa del hueso temporal.
Membrana timpánica: está cubierta por epidermis. Separa el conducto auditivo externo de la caja timpánica. Se ubica en el cuadrante posterosuperior, es una membrana semitransparente, delgada ovalada. Crea una partición entre el conducto auditivo externo y la cavidad timpánica del oído medio.
Está compuesta por 3 capas:
Capa externa: está formada por tejido escamoso. 
Capa media: está formada por fibras radiales externa y es rica en vasos sanguíneos.
Capa medial o interna: formada por la mucosa del oído medio.
La superficie del tímpano está formada por:
Pars flácida: se ubica hacia la parte superior. 
Pars tensa: se ubica en los ligamentos del martillo.

Embriología del Oído Medio
El oído medio deriva de la 1ª bolsa branquial endoblástica. Hacia la 6ª semana, a nivel de esta bolsa, ectodermo y endodermo están muy próximos, hasta que a los 6 meses, endodermo y mesodermo llegan a reunirse formando la membrana timpánica.
Desde adentro, la 1ª bolsa branquial endodérmica se va acercando hacia el exterior ectodérmico, tomando la forma de un canal denominado tubo-timpánico de Kölliker. La parte más superior de este tubo, externa y próxima al ectodermo se conoce como receso tubo timpánico. El canal tubo- timpánico va a dar lugar a la mucosa de la caja, a los espacios aéreos de la trompa de Eustaquio, y a la porción inferior de la cavidad timpánica hasta el nivel de la cuerda del tímpano. De aquí que se diga que la trompa es el origen embriológico del oído medio.
La extremidad dorsal del canal tubo-timpánico expansionándose, forma el esbozo de la caja del tímpano. Los huesecillos rodeados completamente de mesénquima. Primero se forma la cavidad que será el receso hipotimpánico, mientras el resto está todavía ocupado por tejido mesenquimatoso. A esta primera cavidad embriológica se la denomina cavidad timpánica primaria.
 Después la cavidad sigue expandiéndose e invade el mesénquima que la rodea para formar el atrium (10ª semana), el ático (30ª semana), y el aditus (5º mes), formado a partir de la extremidad posterior del ático. La cavidad formada en esta segunda fase se denomina cavidad timpánica secundaria. El antro comienza a formarse al final del 6º mes. La cavidad timpánica no está formada hasta el séptimo mes. La formación de la cavidad timpánica secundaria se realiza mediante tres fondos de saco. El saco anterior crece por fuera del tendón del mango del martillo, el medio rodea este tendón por debajo y dentro para invadir la cara medial del malleus e incus. El estribo es el último huesecillo en incorporarse a la cavidad de la caja. Las primeras celdas mastoideas aparecen también al final del 6º mes.
   El 3º arco branquial, aunque cubierto por el 2º, sigue creciendo hacia adelante por debajo de éste y llega a estrechar la parte interna del seno tubotimpánico para formar la región de la trompa de Eustaquio.
 El antro neumatizado se extiende hacia el hueso de la cápsula ótica para formar celdas aéreas entorno del antro, e igualmente lo hace en dirección lateral hacia el hueso timpánico de la porción escamosa del temporal para formar celdas aéreas en la región de la apófisis mastoides primitiva.
 La neumatización de las cavidades del oído medio, así como la de las celdas mastoideas, se realiza mediante una clarificación del mesénquima y la subsiguiente invasión de las zonas clarificadas por el epitelio de revestimiento. En su progresión el endoblasto forma el revestimiento mucoso de estas cavidades, trompa, caja y mastoides, recubre los huesecillos, amoldándose sobre ellos, quedando así los huesecillos unidos a las paredes de la caja por una especie de mesos epiteliales Estos mesos van a formar los ligamentos suspensorios de los huesos y el diafragma interático-timpánico.
El hueso petroso es perióstico y deriva del cartílago primitivo que forma las paredes interna, anterior y posterior, y la mayor parte de las paredes superior e inferior. La osificación del esbozo petroso tiene dos puntos en que no acaba de realizarse, es a los lados de la ventana oval, quedando dos zonas de cartílago embrionario, son la fisura ante fenestram y la fisura post fenestram.
 La membrana timpánica se forma por la aproximación de la extremidad dorsal del canal tubo-timpánico con el extremo más profundo del CAE. Al final del 6º mes, la pared externa de la caja del tímpano entra en contacto con la extremidad profunda del CAE. Subsiste una fina lámina mesoblástica formadora de la capa media fibrosa. La primera capa que se forma es la capa fibrosa de la pars tensa que deriva de una capa de mesénquima que se interpone entre endoblasto y ectoblasto. Hacia el sexto mes se desarrolla el ático y cuando éste se pone en relación con el CAE, se forma la pars flácida por adherencia directa entre endoblasto y ectoblasto sin mesénquima intermedio.
Huesecillos
En el curso del 2º mes, los huesecillos del oído se diferencian a partir del mesénquima  cercano a la futura caja del tímpano. La excepción es la cara vestibular de la platina que se forma de la propia cápsula ótica.
El estribo comienza a diferenciarse hacia el día 33 como una condensación mesenquimatosa en el extremo dorsal del cartílago del 2º arco branquial, o cartílago de Reichert. Esta condensación tiene la forma anular que va a ser característica de este huesecillo. Cinco días después de su formación está ya atravesada por la arteria estapediana. El esbozo de huesecillo pierde enseguida sus conexiones con el 2º arco, salvo en una zona que es donde se formarán el músculo del estribo y su tendón. El esbozo de condensación mesenquimatosa se aplana por uno de sus extremos y se transforma en cartílago hacia el día 43.
 Al desaparecer el cartílago, las ramas se quedan huecas, convertidas en tubos de hueso perióstico con su centro ocupado por espacio medular. A continuación, e inesperadamente, la primitiva cubierta de hueso perióstico situada en la cara interna de ambas ramas comienza a sufrir un amplio proceso de erosión y a cavitarse. El espacio medular que queda así formado es remplazado por una invasión de mucosa endodérmica.
La cabeza del estribo por su cara interna experimenta una excavación e invasión, similares a las de las ramas, con la diferencia de que junto al cartílago articular se forma hueso endocondral y la plataforma articular es bilaminar.
El estribo alcanza su tamaño definitivo hacia la 20ª semana. Quince días antes del parto el estribo tiene el aspecto del adulto y es ya un hueso viejo que si se fractura no consolida jamás.
Martillo y yunque se originan ambos del 1º arco branquial sus esbozos, así como el del estribo, se forman por condensaciones del mesénquima situadas por encima del canal tubotimpánico. La condensación mesenquimal se forma en el extremo dorsal del cartílago mandibular de Meckel, separándose del mismo hasta el 5º mes por una degeneración de la parte posterior del cartílago.
Hacía las 16 semanas, en el martillo aparece un primer punto de osificación en la cara medial del cuerpo. El hueso queda formado con una cavidad medular en el centro.
El desarrollo del martillo y del yunque es inverso al del estribo, ya que éste es el último en osificarse y en el transcurso de la vida fetal se reduce de tamaño por pérdida de su cavidad medular. Martillo y yunque crecerán todavía más después del nacimiento, sin embargo el estribo alcanza su tamaño máximo al cuarto mes de desarrollo.
Las paredes de la caja del tímpano se adhieren a los huesecillos y los amoldan: éstos hacen entonces prominencia en el interior de caja del tímpano.
Las cavidades del oído medio se llenan de aire a través de la trompa y forman, juntamente con los huesecillos, el conjunto transmisor de las vibraciones hacia el oído interno.
La parte del laberinto óseo frente al estribo permanecerá muy delgada: es la ventana oval correspondiente al tramo vestibular. Por debajo de ella, otro adelgazamiento del laberinto óseo constituirá la ventana redonda correspondiente al tramo timpánico.
La mastoides
El esbozo óseo que da lugar a la mastoides es de origen mesenquimatoso y resulta por la unión de dos porciones del temporal: escama y peñasco. La escama con relación al peñasco está situada más arriba y más anterior que éste, es un hueso de membrana como todos los de la base del cráneo.
Las celdas aéreas se forman por los brotes emitidos en pleno mesénquima por el extremo posterior del canal endoblástico (tubo-timpánico de Kölliker).
La mastoides definitiva no está constituida antes de los cinco años de vida.
Anatomía y Fisiología del oído medio
Es una cámara de aire ubicada entre el oído externo y el oído interno, dentro de la porción petrosa del hueso temporal.
Se separa del oído externo por medio de la membrana timpánica.
Se comunica:
Por delante con la nasofaringe a través de la trompa auditiva  o faringotimpánica (o trompa de Eustaquio).
Por su margen postero superior con las celdas mastoideas a través del antro mastoideo
El oído medio contiene a la cavidad timpánica, que es un espacio ligeramente oblicuo formado por seis paredes, todas tapizadas por una mucosa que presenta epitelio.
La cavidad timpánica presente en su interior:
           Los Huesecillos del oído
           Los músculos del estribo y tensor del tímpano
           El  nervio de la cuerda del tímpano, que es un ramo del VII par craneal.
           El plexo nervioso timpánico
Las paredes de la cavidad timpánica son:
- Pared Lateral o Membranosa:
      En gran parte está formada por la membrana timpánica.
- Pared Medial o Laberíntica:
Limita con el oído interno, Se observa el promontorio, que es la proyección de la base del conducto espiral de la cóclea.
- Pared Inferior o Yugular: Forma el piso de la cavidad timpánica, delimita con el bulbo superior de la vena yugular interna.
- Pared Superior o Tegmentaria: Techo de la cavidad timpánica. Lo forma una fina lámina de hueso.
- Pared Posterior o Mastoidea: Presenta un orificio en su porción superior, que corresponde a la entrada al antro mastoideo.
- Pared Anterior o Carotídea: En esta pared se encuentra la entrada a la tuba auditiva, que conecta el oído medio con la faringe, permitiendo que la membrana timpánica se mueva. Esta pared, además, limita con el conducto carotídeo y el conducto para el músculo tensor del tímpano.
Huesecillos:
En el interior del oído medio se encuentra la cadena de huesecillos que conectan internamente la membrana timpánica con la ventana oval (que se ubica en la pared medial de la cavidad y conecta con el laberinto óseo).
Martillo: El manubrio y la apófisis anterior del martillo están fijadas al tímpano, la cabeza del martillo, se conecta mediante un ligamento con el yunque. La cabeza se ubica en el receso epitimpánico.
Yunque: su cuerpo, ubicado en el receso epitimpánico, se articula con la cabeza del martillo, y su rama larga con el estribo.
Estribo: Su base se inserta en una apertura de la ventana oval, que conecta con el laberinto óseo (que protege la cóclea). La cabeza del estribo se articula con la rama larga del yunque
Las funciones de los huesecillos son trasmitir y amplificar el sonido, por medio de músculos que se insertan en los huesecillos.
Membrana Timpánica:
Es una membrana semitransparente delgada, que en condiciones normales presenta un color gris perla y es ovalada. Se sitúa en el extremo medial del conducto auditivo externo.
Presenta dos porciones:
La porción flácida se ubica sobre la apófisis lateral del martillo, y se caracteriza por ser más delgada que la porción tensa. Además crea la pared lateral del receso superior de la cavidad timpánica. La porción tensa presenta fibras radiales y circulares.
La membrana timpánica presenta:
- Una concavidad hacia el conducto auditivo externo.
- El ombligo del tímpano, que corresponde a una fina depresión central, cónica, ubicada justo en el centro de la porción tensa de la membrana.
- La estría del martillo que corresponde al manubrio del martillo, se observa como una línea clara.
- Un Reflejo o Cono de luz, es de forma triangular y es producto de la luz incidente. Se ubica en la región antero inferior de la membrana.
Embriología del Oído Interno


La primera manifestación del desarrollo del oído puede observarse en embriones de 3 semanas, en forma de engrosamiento del ectodermo superficial a cada lado del romboencéfalo, o mielencéfalo en desarrollo (placodas auditivas).
Estos engrosamientos se invaginan rápidamente para formar la fosita auditiva. La fosa se profundiza y finalmente se cierra su abertura superficial y el revestimiento epitelial constituye ahora un saco cerrado, las vesículas auditivas.
En su desarrollo posterior cada vesícula se divide en: 1) un componente ventral que da origen al sáculo y al conducto coclear, y 2) un componente dorsal que forma el utrículo, los conductos semicirculares, y el conducto endolinfático. Todas estas estructuras epiteliales así formadas reciben el nombre de laberinto membranoso.
Sáculo, Caracol, y Órgano de Corti
En la 6ta semana de desarrollo el sáculo forma una evaginación tubular en su polo inferior. Este brote, el conducto coclear, se introduce en el mesénquima circundante en forma de espiral hasta que al término de la 8va semana, ha descrito 2 vueltas y media, quedando conectado con el sáculo restante por un conducto estrecho, el conducto
saculococlear de Hensen.
El mesénquima que rodea al conducto coclear pronto se diferencia en cartílago, que a partir de la 10ma semana comienza a experimentar vacuolizaciones y se forman 2 espacios perilinfáticos, la rampa vestibular y la rampa timpánica. En esta etapa el conducto coclear queda separado de la rampa vestibular por la membrana vestibular, y de la rampa timpánica por la membrana basilar. La pared lateral del conducto coclear se mantiene unida al cartílago adyacente por el ligamento espiral, mientras que la pared interna está unida y sostenida por una larga prolongación cartilaginosa, la columela, futuro eje del caracol óseo.
Las células epiteliales del conducto coclear se diferencian y forman dos crestas: la cresta interna (futuro limbo de la lámina espiral) y la cresta externa, que produce 1 hilera interna y 3 ó 4 hileras externas de células ciliadas. Estas quedan cubiertas por la membrana tectoria, sustancia gelatinosa fibrilar que es llevada por el limbo de la lámina espiral y cuyo extremo se apoya sobre las células ciliadas. Ambas estructuras se llaman órgano de Corti. Los impulsos que este recibe son transmitidos al ganglio espiral y luego al sistema nervioso por las fibras del octavo par craneal.

Embriología del aparato vestibular

En la porción petrosa del hueso temporal se encuentra el aparato vestibular . Este consta de dos máculas: la utricular y la sacular, ubicadas en las dilataciones homónimas de este hueso y tres pares de crestas acústicas en las ampollas de los conductos semicirculares: anterior, posterior y lateral u horizontal.

El mecanismo general de excitación de los receptores vestibulares se produce al ser desviados los cilios hacia el kinocilio en las células, lo que provoca la apertura mecánica de canales de iones positivos con efecto despolarizante. Estas, en su base, están en íntimo contacto con las neuronas del VIII par craneal donde el potencial de receptor provoca trenes de potenciales de acción que viajan por las fibras nerviosas y hacen sinapsis en los núcleos vestibulares que están situados en el tallo cerebral. La información nerviosa generada por los receptores vestibulares viaja a través de la porción vestibular del VIII par craneal que penetra al tallo cerebral a nivel del puente del tronco encefálico. A este nivel hay cuatro núcleos vestibulares, que reciben las sinapsis de estos axones, provenientes de las crestas y máculas.

El aparato vestibular tiene las siguientes funciones:

1. Sensación de movimiento y la orientación espacial.

2. Envía información a áreas del sistema nervioso del control del motor, provoca ajustes de la actividad muscular y la posición del cuerpo para permitir la postura erguida.

3. Controla los movimientos del ojo durante el movimiento de la cabeza. Esto reduce el movimiento de la imagen de un objeto fijo en la retina.
4. Detectar aceleración y desaceleración, ya sea lineal o angular.

El utrículo y el sáculo son bolsas de membrana llenas de endolinfa, que tienen una zona de la pared tapizada de un epitelio de células ciliadas. Estas células ciliadas están cubiertas de una gelatina, sobre la cual están depositados cristales de carbonato cálcico. Cuando la cabeza se inclina con respecto a la vertical, los cristales de carbonato cálcico tienden a deslizarse hacia un lado por su peso, y al hacerlo inclinan los estereocilios hacia un lado.

Los canales semicirculares están suspendidos en perilinfa, y en su interior hay endolinfa. Cada canal semicircular está formado por células ciliadas y de sostén cubiertas por una sustancia gelatinosa que cierra la ámpula. Las máculas contienen células ciliadas cubiertas por una membrana otolítica en la que están insertados los otolitos.

Cóclea

La cóclea o caracol es un sistema de tubos enrollados, con tres tubos diferentes, uno al lado del otro, denominados rampa vestibular, rampa media y rampa timpánica.
 La rampa vestibular y media se hallan separadas entre sí por la membrana de Reissner (M.R.), la rampa timpánica y la rampa media se hallan separadas por la membrana basilar (M.B.).
En la superficie de la membrana basilar se halla una estructura, el órgano de Corti, que contiene una serie de células mecánicamente sensibles, llamadas las células ciliadas.
La rampa vestibular y la rampa timpánica se encuentran llenas de perilinfa, ésta es rica en sodio y pobre en proteínas. La rampa media contiene endolinfa la cual es rica en proteínas y contiene sobre todo potasio.
La rampa vestibular se relaciona con la ventana oval mediante el vestíbulo y la rampa timpánica limita con la ventana redonda. Ambos conductos comunican abiertamente en el vértice del caracol o helicotrema.
La importancia de la membrana de Reissner depende de que conserve la endolinfa en la rampa media necesaria para el normal funcionamiento de las células ciliadas.
En su parte ósea, la cóclea es un tubo ligeramente cónico enrollado sobre sí mismo en 2 1/2 vueltas, de aspecto muy similar al de un caracol.
Órgano de Corti
Está formado por células de soporte, las células ciliadas sensoriales, la membrana tectoria, y las fibras nerviosas.
Es el órgano terminal neural de la audición. Descansa sobre la membrana basilar. Se extiende a lo largo de toda la cóclea. Aproximadamente 30 mil células ciliadas pilosas se proyectan desde el neuroepitelio. Cuando estas células se mueven por efecto del sonido este se convierte de fuerza mecánica en un impulso electroquímico.
Células Ciliadas
Las células ciliadas se dividen en 2 tipos:
- Las células ciliadas externas y cilíndricas están por fuera de los pilares de Corti en 3 filas paralelas, aunque en algunos casos se han observado 4 o 5 filas en la zona apical. Los estereocilios de las células ciliadas externas están adheridos a esta membrana responsable de su deflexión ante estímulos acústicos.
- Las células ciliadas internas presentan cierta forma de botella. Están dispuestas en una sola fila.
La Membrana Tectoria (M.T.)
La membrana tectoria es una estructura gelatinosa que se extiende desde la lámina espiral hasta la altura de las células de Hensen, por encima del órgano de Corti.

Bibliografía
  • Tortora. Derrickson. Principios de anatomía y fisiología

Infografía
  •   http://www.slideshare.net/geyser_mg72/embriologia-del-oido